SIMÓN BOLÍVAR EN EL ALMA DEL PUEBLO IV
(Homenaje a
Gerardo Aguilera Silva)
LA IMAGEN DE BOLÍVAR EN EL ARTE POPULAR
Gerardo Aguilera
Silva
Autorretrato (s.
f.)
Colección Régulo Martínez
Fotografía Augusto Hernández (1993, p. 47)
Escaner de imagen Esp. Víctor A. Hernández
“Viene
todo sucio, despeinado, con pantalones y camisa crema, una cinta tricolor
desteñida y botas altas y negras. Yo me quedo mirándolo dura y asustada y él
cinco palabras me dice: ‘Vengo cansado, traicionado y derrotado’. Yo ahí lo
conozco y veo que es El Libertador ‘¿Qué hace señora?’, me dice. Tallo a San
Juan, le digo. ‘Esta bien, termínelo y luego me hace a mí, así como estoy’, me
dice. Ahí me despierto. El padre me aconsejó que me pusiera a tallar como en el
sueño, y aquí uste tiene a Bolívar y a San Juan igualitos a como los ví en la
revelación” (Blasina Mendoza, testimonio en Mariano Díaz, 1989 p. 156).
Hemos llegado a la IV Edición de “Simón
Bolívar en el Alma del Pueblo”. En esta oportunidad, se le rinde un merecido
homenaje a todos los cultores populares aquí presentes de los estados: Monagas,
Anzoátegui, Sucre, Bolívar, Miranda, Carabobo, Aragua, Mérida, Táchira,
Trujillo, Lara, Falcón, Vargas, y Distrito Capital; pero de manera muy especial
a Gerardo Aguilera Silva, de él se exhiben 11 obras. Aguilera Silva es, dentro
del arte popular venezolano, el más dedicado, y quizá el pionero en popularizar
dentro de este género, la iconografía oficial del Libertador, tomando como
modelo, las pinturas realizadas por Ricardo Acevedo Bernal, Tito Salas y Arturo
Michelena, vistas seguramente en revistas.
El motivo inspirador de crear este espacio
en la Web dedicado a la imagen del Padre de la Patria, fabulada por nuestros artistas sin academia, fueron tres
publicaciones que leí hacen algún tiempo referido a Bolívar, que expongo a
continuación:
La primera, fue una publicación de la
Galería de Arte Nacional (1983), de un evento expositivo dedicado a Simón
Bolívar llevado a cabo en sus espacios y del Museo de Bellas Artes, organizado
de manera conjunta por estas dos instituciones y el Consejo Nacional de la
Cultura (CONAC), en el marco de la celebración del Bicentenario de su
Nacimiento. Se exhibieron en esa oportunidad un número considerado de objetos y
obras de arte referidos a Bolívar, tales como: reproducciones del Bolívar de
Miraflores; Bolívar según el Pueblo (1783-1814), (1822-1830); Bolívar de las Plazas
(serie de postales post card) originales de formato 9x14 centímetros de fechas
comprendidas entre (1920-1940); San Simón Dispensador de Favores, en el cual se
mostraron objetos referido al culto religioso del prócer; La Gloria de Bolívar, en la que presentaron un
conjunto de obras de arte popular, dentro de los que cabe destacar artistas
como: Gerardo Aguilera Silva, Elsa Morales, Bárbaro Ribas, Víctor Millán, Elba
Meneses, entre otros: y Reproducciones y Otros (Consejo Nacional de la Cultura/Galería
de Arte Nacional/Museo de Bellas Artes, 1983).
La segunda inspiración, fue el libro de
Juan Calzadilla y Mariano Díaz (1983): “Bolívar Hecho a Mano”, publicado por
Cerámica Carabobo, el cual recibió el premio como el mejor libro en su género
ese año. En esta obra, el autor refiere la visión subjetiva de la iconografía
de Bolívar de 31 obras de 58 creadores de los estados: Trujillo, Mérida,
Falcón, Lara, Aragua; y Distrito Capital, en los reglones: talla en madera y
piedra, cerámica, terracota, cemento, anime, siporex, papel maché, tapiz.
La tercera, fue el libro de Mariano Díaz
(1993): “65 Hombres para Bolívar. El Libertador de las Mujeres”, publicada por
Cerámica Carabobo, donde el investigador presenta 174 obras de 111 artistas, en
las técnicas: cerámica, pintura, talla en madera, tapiz, barro, yeso), de las
entidades federales: Mérida, Trujillo, Aragua, Carabobo, Monagas, Sucre,
Yaracuy, Táchira, Vargas, Zulia, y Distrito Capital. Estas obras presentadas en
las tres publicaciones comentadas, de alguna manera reflejan la iconografía
popularizada por los artistas del común y de la industria inspirada en la
imagen oficial.
Quizás, el pintor popular más obsesivo y
el primero dentro del arte popular en divulgar a través de la pintura, la
imagen de Bolívar inspirado en la iconografía oficial representada por Ricardo
Acevedo Bernal (colombiano), Arturo Michelena y Tito Salas, indiscutiblemente
fue Gerardo Aguilera Silva (Barcelona,
1907-1976). Al respecto, señala Calzadilla (1983), es:
autor de una obra casi
exclusivamente consagrada a reinterpretar las conocidas versiones bolivarianas
de Acevedo Bernal, Michelena y Tito Salas; los caracteres acusadamente
expresionista, que llegan al paroxismo, nos llevan en último término a
reconocer en la iconografía elaborada por Aguilera los rasgos atormentados del
pintor. Bolívar es, así pues, el
autorretrato de Aguilera, lo que no quiere decir ausencia de un profundo
sentimiento bolivariano, que nadie expresó con igual fuerza que él (p. 5).
Ahora
bien, cabe peguntarse ¿De dónde surgió el interés por pintar a Bolívar y dedicarle
una obra casi exclusivamente a él? La respuesta la encontramos en esta opinión que
nos da Juan Calzadilla (1977/1978), de esta manera, Gerardo Aguilera Silva en
su juventud se aficionó a la lectura de libros de historia patria, de donde
surgió el interés por la iconografía de los héroes nacionales y un gran
conocimiento de las genealogías regionales. Además de lo indicado por
Calzadilla, yo que viví 50 años en Barcelona, y los que estamos vinculados al medio
artístico de esta ciudad sabemos que este sentimiento de simpatía por los
próceres patrio en el pintor, en gran parte se debe a la influencia que tuvo en él, su
maestro, el Bachiller don Matías Núñez, con quien Aguilera Silva estudio en su
colegio hasta tercer año. Núñez era un ferviente admirador de Bolívar, lo que
pudiéramos llamar un bolivariano declarado. La obsesión por la iconografía
bolivariana, fue lo que lo indujo a realizar una obra, en el arte popular casi
exclusiva del Libertador; que lo convirtió, de acuerdo con Calzadilla (ob.
cit.), por encima de su fama de loco, que gran parte de los venezolanos le
atribuían, en el mayor pintor que había tenido Barcelona desde Ramón Bolet Peraza.
Al respecto, escribe Mariano Díaz (1991) sobre Aguilera Silva lo
siguiente
“Será cronicador de un Bolívar dramático y
fuerte, donde olvidará el perfil del héroe para trasladarle sus gestos y sus
rasgos” (p.28). De igual manera, Calzadilla en 1966, poco tiempo después de que
a Gerardo Aguilera Silva se le realizara la exposición en el Museo de Bellas
Artes en Caracas, escribió: “Aguilera no admite que le compare con otro pintor
que no sea Arturo Michelena… Sus retratos de Bolívar no solo son los más
‘personales’, agresivos y arbitrarios, sino también y en cierto modo los más
fieles a una expresión soberana, a una iracundia, a una fuerza interior lograda
a través de los medios plásticos más válidos” (pp. 89-90). Además de “verse, él
mismo, un maestro comparable a Michelena y a Tito Salas” (Calzadilla, 1977/1978
p. s/ n.). De igual forma Calzadilla (ob. cit.), señala: “Porque como
expresionista Aguilera no hace más que objetivarse en esas visiones donde lucha
por obtener, para sus figuras, un parecido anatómico que sólo existe en su creencia
de haber logrado la perfección de los clásicos” (p. s/n.)
Desde luego, las imágenes de Bolívar pintada
por Aguilera Silva nada tienen que ver en parecido a la imagen oficial. Para
Calzadilla (1983): “La iconografía oficial sobre la imagen de Bolívar no ha
suministrado, incluso allí donde el héroe posó para el artista, versiones
diferentes y polémicas de su físico” (p. 7). Cabe citar aquí a Rojas (1988),
quien refiere que en una oportunidad se exhibió en la Sociedad Bolivariana de
Caracas un cuadro de Bolívar pintado por un artista de quien no da referencia
del nombre, decir acerca de la pintura, que era mala, expresando su desencanto
de esta manera: “veo que todavía las nuevas escuelas plásticas si han captado
la figura del Libertador no la han entendido del todo” (p. 15). Además de lo
indicado, este autor refiere las pinturas elaboradas por los Salas de Ecuador
del Padre de la Patria, como un Bolívar manso, tranquilo, sereno, son esos
retratos que no impacta al espectador, artistas fríos. Al respecto, apunta
Boulton (1983), quien ha hecho un estudio exhaustivo de la iconografía del
Libertador, lo siguiente:
Su verdadero rostro, como
frecuentemente sucede con los grandes hombres, ha sido deformado al
popularizarse, lo que en gran parte se comprende por la falta de una bien
disciplinada iconografía y por haberse copiado indiscriminadamente, de modo
desordenado, aun durante su vida, retratos carentes de veracidad fisonómica (p.
36)
Lo que refiere Boulton explica, que las figuras
de Bolívar del arte popular se alejen de su parecido real. Es más un
sentimiento, un fervor al héroe, que una representación facsimilar de él.
Incluso, sobre este particular el mismo Gerardo Aguilera Silva le deja el
siguiente testimonio a Luis Luksic (1966), de esta manera: “Siempre los cuadros
tienen algo del sueño de los hombres” (p. s /n.). La imagen representada por
nuestros artistas del común, y es el caso de Gerardo Aguilera Silva, es una
imagen muy subjetivada, que representa de algún modo no sus rasgos físicos,
sino más bien sus cualidades espirituales, sicológicas, personales o de otra
naturaleza. En este sentido, expresa la artista del barro Eloísa Torres, este
testimonio a Pérez Carmona y Prada Barazarte (1989): “A Simón Bolívar lo hago como me imagino que él sería; de un
color que no era muy blanco, rosado por el sol, los ojos muy vivos, la boca muy
bien firme. Bolívar creo que fue un
hombre que Dios nos mandó” (p. 36). Para Blasina Mendoza en Mariano Díaz (1989) tallar en madera a Simón Bolívar es un
acto de fe como tallar a San Juan, producto de una revelación, como lo ve en
sueños. Lo talla como ella lo vio en sueños. De modo que la imagen que de
Bolívar se hacen nuestros artistas populares obedecen a circunstancias muy personales.
Sobre la imagen de Bolívar creada por
Aguilera Silva, señala Roberto Guevara (1977): “Bolívar es de un valor, de tipo
psíquico y social, que genera en el pintor una constante necesidad de respuesta
y replanteo. La figura patriótica es el
encuentro con un yo magnificado. Aguilera andaba perdido en su yo, y buscaba
otro para dignificarlo, para ubicarlo en el más alto pedestal” (p. A-4). En
este mismo orden de ideas, apunta Calzadilla (1977) “su desamparo social y
emocional, de su naturaleza disminuida y contrahecha por los años, que él trata
de compensar, no sólo con la ferocidad de su orgullo, sino también con los
trajes marciales y las maneras que presta a los retratos del Libertador, donde
cree reconocerse” (p. s/n.).
Sobre este particular, Díaz (1991)
señala: “Gerardo Aguilera Silva quiere ser el mejor y así camina hacia su
propia gloria con cartones y sapolines” (p. 28). A esto habría que agregar los
facsímiles que le servían de modelo y la poca información de que disponía el
artista. En este sentido, cabe recordar lo expresado por Calzadilla (1975),
“Aguilera Silva no disponía más antecedentes que la información visual
distorsionada que le proporcionaban libros y revistas y que él traduce a
imágenes de un ingenuismo pretenciosamente académico, al igual que su torpeza
delirante conduce al estado de pureza del arte de los locos” (p. VI). Calzadilla
(1983), argumenta que por lo general pinta un Bolívar de carácter
autobiográfico relacionado a la idea que Aguilera Silva se ha hecho del
Libertador, que explica de algún modo lo que siente y cree sobre el héroe en
términos reales, históricos, mágicos.
Sobre este particular refiere Mariano
Díaz (1993):
El culto popular a Simón Bolívar, transforma
la historia y la iconografía oficial, con una posesión particular del ciudadano
que lo siente necesario, mágico y protector. La conciencia popular otorga a
Bolívar el aura de la religiosidad, y por ello comparte la imaginería de la
devoción junto a vírgenes y santos, en los altares hogareños y en las oraciones
familiares” (p. 3).
Asimismo, Armas Alfonzo (1983/2003) nos
ha dejado también una impresión de la
figura creada por Gerardo Aguilera Silva, en estos términos:
A sus Bolívar los envestía de
grandes colores, pero la figura seguía siendo acuchillada, como miserable, sin
presencia humana casi como no fuera sobre el desgarrón de la boca de hule o
patente el pantalón blanco o el dormán de las batallas de Carabobo, los enormes
ojos escrutadores y el ceño de la boca desdeñosa. Heroicidad así vista e
interpretada jamás la asumió Tito Salas para los murales de la inmortalidad (107-108).
Sin
embargo, respecto a Gerardo Aguilera Silva como pintor, Da Antonio (1988), emite el siguiente juicio:
El más relevante pintor ingenuo de
Barcelona, casi inmediatamente después de su revelación, abrió su primera
exposición en Museo de Bellas Artes en 1964(sic) (aclaratoria: 1966, julio).
Sus óleos, esmaltes industriales sobre cartones ensamblados a la manera de
“collages” denunciaban la presencia de un pintor cuyo rigor compositivo,
intuición plástica y disciplinado oficio, contrastaban con su atrabiliario
discurso (p. 31).
Aguilera Silva realizó pinturas
ecuestres de Bolívar inspirado en Tito Salas. Al respecto cabe señalar, según
Da Antonio (1983), refiriéndose a Salas, que ningún pintor de América Latina
del siglo XIX a este tiempo (1983), dedicó tanto entusiasmo a la figura ecuestre
de Simón Bolívar como él desde su más temprana juventud. Antes de pintar en
1938 el Bolívar de Miraflores por encargo del General Eleazar López Contreras,
inspirado en la Estatua Ecuestre de Simón Bolívar realizada por AdamoTadolini
para la plaza Bolívar de Caracas (molde creado en 1858) y (fundida en 1874),
realizó cinco grandes imágenes ecuestres: Paso
de Los Andes, tríptico (1910-1911), pintada para el Palacio Federal;
Emigración a Oriente (1913); Toma de las Flecheras (1921); Batalla de Araure
(circa 1927); y la Apoteosis de Bolívar (1830), estas cuatro últimas pintadas
para la Casa Natal del Libertador.
La figura ecuestre de Miraflores ha sido
la más inspiradora en tanto a imagen del Libertador, no sólo por Gerardo
Aguilera Silva, de la que la Galería de Arte Nacional tiene dos en su
colección, sino también por los demás cultores populares. Quizá la razón se
deba al despliegue publicitario que hizo de ella la industria y otras empresas
conexas. Ya para el año 1938 aparece un tiraje “cromolitográfico sobre cartoné
texturizado brillante, reproducción del original, firmado por Tito Salas en el
ángulo inferior derecho, 101x82 cm…
colección Sociedad Maraury” (Consejo Nacional de la Cultura / Galería de Arte
Nacional / Museo de Bellas Artes, 1983 p. 8).
Una de estas reproducciones fue exhibida en la exposición “Bolívar en el
Alma Popular” organizada por el Conac, Galería de Arte Nacional y Museo de
Bellas Artes en 1983 en el Bicentenario
de su Nacimiento. Al respecto señala Esteva-Grillet (1983), lo siguiente:
Pero esa imagen de Bolívar (en
especial la de Tito Salas), multiplicada por la industria, la vemos ya en todas
partes en diversos tamaños y adornando gran cantidad de objetos y confeccionado
en variedad de materiales. Portarretratos, llaveros, cajas de fósforos, platos
de cobre repujados, bustos, estatuillas ecuestres, álbum de cromos,
historietas, relojes de pared, afiches, etc. (p. 20-21).
Esto innegablemente ha influido en que la
imagen oficial del Libertador se haya hecho común y muy conocida por nuestros
artistas populares y público en general. En este sentido, Calzadilla (1983)
señala que la artista trujillana Eloísa Torres ha creado tres o cuatro
prototipos de Bolívar, de los cuales sobresale la figura ecuestre inspirada en
el conocido Bolívar de Tito Salas. Ahora bien, esto no queda aquí. La
idealización de Bolívar asume las más diversas formas, desde un santo o profeta
como en el caso del pintor popular Bárbaro Ribas, pasando por la humanización
de niño como en la cronología en barro que hace de Bolívar, Glenda Mendoza.
Sobre Bolívar, cabe decir, se abordan
además, sola o de manera simultánea, todas sus facetas y anécdotas,
representándolo como romántico, galán, esposo, viudo, enamorado, maestro,
visionario, soldado, estadista, protector de su pueblo y símbolo de un anhelo
permanente de justicia (El Nacional/Fundación Bigott, 2008). Estas referencias
nos indican que el tema bolivariano es de gran importancia en nuestros artistas
populares. Al respecto, señala Calzadilla (1983) los artistas populares son los
que han interpretado con mayor acierto la mitología bolivariana. En el artista
popular, la interpretación de Bolívar es tanto más subjetiva, pues el creador
no se esfuerza en reproducir su imagen; no la representa, sino fabula, recrea,
mitifica (Calzadilla, ob. cit.). Por tal
motivo, no es de extrañarnos, como lo señala El Nacional/Fundación Bigott (2005),
lo siguiente:
Junto a los santos y
las vírgenes, el tema más recurrente en el arte popular venezolano es el de
Simón Bolívar. Bolívar ha sido representado en todos los soportes imaginables
–pintura, madera, barro, piedra- y en las más diversas etapas y situaciones de
su vida, desde escenas de nacimiento, infancia y juventud hasta en versiones
cercanas a las de un santo, profeta o místico, pasando por peculiares
interpretaciones de su gesta libertaria y militar (p. 276).
Al
respecto, escribe Hernández D’ Jesús (2011):
Es el
Bolívar visionario, el de la salvación de las almas, identificado en esa
conjunción de lo profano y lo divino con San Benito, la Virgen del Carmen y de
la Coromoto, la Reina María Lionza, el doctor José Gregorio Hernández, quienes
entre otros, constituyen el Reino de las
Capillas caseras. En la más cercana forma de lo sagrado y de lo espiritual (p.
13).
Sobre el particular, José Belandria, merideño, tallista de la madera, le
refiere a Hernández D’ Jesús (ob. cit.), estas palabras: “Yo tengo a Bolívar
aquí en mi cuarto. Yo le estimo como estimar primeramente a Dios. Yo le rezo un
padrenuestro todas las noches. Después de Dios Bolívar, por él estamos en
libertad. Las piezas que hago… muñecos con cuerditas, y ellos se mueven, y los
Simones Bolívares se mueven y me acompañan” (p. 21). En este mismo orden de
ideas, apunta Perán Erminy (2001), refiriéndose al pintor popular Luis Méndez o
Luiz Mendes: “Y como no encuentra certeza alguna, se aferra a su fe en Cristo,
prologándole en el sincretismo de su devoción al culto patriótico de El
Libertador” (p. 9).
Sobre este particular, en otro trabajo, escribe Hernández D’ Jesús
(1977), en esta misma idea, del testimonio de Juan Alí Méndez, tallista del
sector La Laguna de Tovar, Estado Mérida, “las tallas son mi vida: Cristos,
Bolívar y Libertadores, Virgen de Coromoto, pavos reales, animales, gallos, no
de comer, sino de madera” (p. s/n.). En la misma obra el autor, recoge el
testimonio, sobre este particular del tallista de Guanare, Estado Portuguesa, Jesús
María Rodríguez, en estos términos: “Hago siempre figuras donde está Bolívar y
los Libertadores, porque a esos papeles hay que sacarles ideas de esa manera,
hay que darles más importancia” (p. s/n.). De modo que la figura de Bolívar por
parte de nuestros creadores ocupa un papel importante en la realización de sus
obras, es tan así, que Perán Erminy (2001), en el texto del catálogo del II
Salón Bigott de Arte Popular, sobre este tema escribe: “Pero la figura del
Libertador es más frecuente, sobre todo en tallas policromadas” (p. 28).
Quien escribe, ha tenido la oportunidad de
viajar por 21 estados de Venezuela y el Distrito Capital y visitar los talleres de muchos artistas
tales como: Josefa Zurbarán (+), Nabor Terán, Alberto Manzanilla (Trujillo);
Luis Barón (+), Amelia Carrero, Miguel Ángel Parada Ramos (+), Doralina Vera
(+), Mariano Rangel, Orangel Moreno, María Edita y Elda La Cruz (las muditas),
Heriberto Belandria (Mérida); Ignacio Arenas, Luis Pedro Malavé, Jesús María
Jiménez, Cleto Rojas, (Sucre); Luis Méndez,
Rosa Vegas, Natividad Caicuto, Leonardo Caicuto (+), José Delfín, Valito
Siso, Pedro Caigua (Anzoátegui), Grone Romepri, José Ramón Brito (Lara), Los
Hermanos Cordero, Berkis González, Jesús Font, Cantalicio, Beatriz Luongo, Luis
Brito, Freddy Carrera y Mireya de Carrera, Julio Aguilera (+) y Mercedes de
Aguilera (Monagas); Marcelino Mejías, Marcelino Almeida (+), Julio Blanco
(Miranda), Oswaldo Mora (Carabobo, coleccionista y artista popular), Rosa
Malavé, Margarita Pereira (Nueva Esparta) y tantos otros que se escapan de la
memoria a lo largo de estos últimos 20 años. Además de visitar galerías y
galeristas, colecciones privadas y públicas y eventos de esta naturaleza, como
por ejemplo la de Dr. Oswaldo Mora (Carabobo), puedo ratificar lo arriba
indicado por El Nacional / Fundación Bigott.
Desde aquella iniciativa de Juan Calzadilla
y Mariano Díaz, la cual celebro, hasta
el 2018, la producción de obras referidas a la imagen del Libertador no se ha
detenido, más bien va en aumento, es por ello que he tenido la disposición al
igual que Mariano y Juan de seguir la senda que ellos abrieron en los años 80,
cuando pocos tomaban en cuenta a los artistas del común, muchos de ellos vivían
en zonas remotas (antes del internet), desconocidos e ignorados por muchos, y
en algunos casos sus obras despreciadas por coleccionistas y galeristas e
instituciones del Estado.
Sin embargo, hoy el panorama ha cambiado, gracias a instituciones y personas tales como:
Fundación Bigott, Galería de Arte Nacional quienes en este sentido le ha dado un impulso
significativo en divulgar este tipo de tradiciones venezolanas a través de sus
publicaciones, al igual que coleccionistas y galeristas como es el caso de
Jorge Hulian con su colección “Los Colores de mi Pueblo”, propietario de
Gallery – South Miami Florida, USA; el emprendimiento del también cultor
popular Luis Acosta Cáceres, con su portal “Arte Popular y Artesanía de
Venezolana”, Oswaldo (https://www.instagram.com/coleccionapv/?hl=es-laa), Omar
Rodríguez (Galería Arte Pueblo), Museo de Arte Popular Bárbaro Ribas, Museo
Salvador Valero, Museo de la Tradición Rafael Vargas, divulgadores como Perán Erminy, Francisco Da
Antonio, Juan Calzadilla, Roberto Guevara, y tantos otros que se me van de la
memoria.
En el presente, se dispone en la red
espacios para la creación de portales de
carácter gratuitos que permiten la divulgación referente a este tema, con la
ventaja que pueden llegar a todas los países del mundo. Recuerdo que en 1998 cuando
ingresé como becario de la Universidad Nacional Experimental “Simón Rodríguez”
de donde egresé de la carrera de Educación, de la cual me hice merecedor de una
beca de postgrado, para estudiar en convenio Fundación Universidad Virtual
Simón Rodríguez / Instituto Tecnológico de Monterrey Universidad Virtual
(México), la primera maestría el línea implementada en Venezuela, se hablaba
del fenómeno de la “globalización”, de “aldea planetaria” o “aldea global”,
término acuñado en los años setenta por Marshall
MacLhan, se especulaba en ese entonces que la globalización iba a destruir las
culturas locales, mi postura en ese entonces era, y todavía la sostengo, que
así como nos podían enviar “enlatados culturales” de otras partes del mundo,
nosotros, los venezolanos, teníamos el libre albedrío de crear nuestros
portales para divulgar nuestras tradiciones, fue así que años más tarde (2011),
cree mi portal referido al arte popular venezolano (artepopularvenezolano.blogspot.com)
para dar a conocer los artistas
populares y sus creaciones.
La idea en este sentido es seguir creando
espacios, seguir publicando trabajos, para que de esta manera el fenómeno
global no nos haga invisibles culturalmente.
Esto de alguna manera justifica haber creado mi portal referido al Arte
Popular de Venezuela y esta edición que alude al Padre de la Patria en el
contexto de su iconografía, creada por su más connotado iconógrafo dentro del
arte popular de Venezuela, Gerardo Aguilera Silva, y otros aquí presentes (que
no son todos) ¡Celebremos la iconografía del Padre de la Patria realizadas por
nuestros artistas del común¡
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Bolíbar (sic) (2012)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
3. Víctor Sánchez (Jesucristo)
Bolíbar (sic) Mortis
(2012)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
4. José Enrique
Moreno
Simón Bolívar (s. f.)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
5. Miguel Pérez
América en el tiempo
(2015)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
6. Miguel Pérez
La Primera lección
(2015)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
7. Miguel Pérez
Bolívar entrando
triunfante en Caracas 1813 (2013)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
8. Miguel Pérez
Rostros del
Libertador (2013)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
9. Miguel Pérez
Simón Bolívar (2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
10. Omar Rodríguez
Bolívar héroe de
eternidades (2010)
Barquisimeto, Edo.
Lara
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas
C. D.
11. Omar Rodríguez
Bolívar (2016)
Barquisimeto, Edo.
Lara
Colección y fotografía
Manuel Bas, Caracas C. D.
12. Mairym Gómez
Boda del Libertador
con María Teresa del Toro (2016)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
13. Mairym Gómez
Simón Bolívar (2016)
Los Teques, Edo. Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
14. Mairym Gómez
Simón Bolívar en su
lecho de muerte (2016)
Los Teques, Edo. Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
15. Julio Blanco
Encuentro de Bolívar
y San Martín en Guayaquil 1822 (2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
16. Julio Blanco
Retratos de Bolívar
(2018)
Los Teques, Edo
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
17. Julio Blanco
Retratos del
Libertador (2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
18. Julio Blanco
Bolívar Ecuestre
(2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
19. Julio Blanco
Estatua Ecuestre de
Bolívar (2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
20. Julio Blanco
Bolívar Ecuestre
(2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
21. Julio Blanco
Simón Bolívar (2017)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
22. Julio Blanco
Estatua Ecuestre de
Bolívar (2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
23. Luis Dionisio Rodríguez (+)
Estatua Ecuestre del
Libertador (s. f.)
Barquisimeto, Edo.
Lara
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
24. Luis Dionisio
Rodríguez (+)
El Libertador (s. f.)
Barquisimeto, Edo
Lara
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
25. Luis Dionisio
Rodríguez (+)
Bolívar y Sucre en
Campaña (2011)
Barquisimeto, Edo.
Lara
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
26. Jaime Rolingson
El Libertador (2016)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
27. Jaime Rolingson
Simón Bolívar (2016)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas C. D.
28. Jaime Rolingson
Bolívar El Libertador
(2016)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
29. Jaime Rolingson
Bolívar en Campaña
(2016)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
30. Jaime Rolingson
Bolívar y sus
Edecanes (2016)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
31. Jaime Rolingson
Bolívar Triunfador,
1813 (2016)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y fotografía
Manuel Bas, Caracas D. C.
32. Natividad Caicuto
Matrimonio de Simón
Bolívar (2009)
La Curbatera, Caigua,
Edo. Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
33. Natividad Caicuto
Estatua Ecuestre de
El Libertador (2009)
La Curbatera, Caigua,
Edo. Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
34. Hugo Díaz
Simón Bolívar (2018)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
35.
Elizabeth Conde
Bolívar jugando
papagayo montado en su caballo (s. f.)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
36.
Valito Siso
Bolívar en San Mateo
(2009)
San Mateo, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
37. Carmen Sánchez (+)
El Samán de Güere
donde Bolívar amarraba el caballo para descansar (2000)
Caracas, D. C.
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
38. Pedro José
Delgado
Bolívar en todos los
tiempos luminaria de América del Sur (2007)
San Cristóbal, Edo.
Táchira
Colección y fotografía
Manuel Bas, Caracas D. C.
39.
Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía Fundación Museos Nacionales / Galería
de Arte Nacional, Caracas D. C.
40. Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía Fundación Fundación Museos
Nacionales / Galería de Arte Nacional, Caracas D. C.
41. Gerardo Aguilera
Silva (+)
Estatua de Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía Fundación Museos Nacionales / Galería
de Arte Nacional, Caracas D. C.
42. Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía Fundación Museos Nacionales / Galería
de Arte Nacional, Caracas D. C.
43. Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía Fundación Museos Nacionales / Galería
de Arte Nacional, Caracas D. C.
44. Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía Fundación Museos
Nacionales / Galería de Arte Nacional, Caracas D. C.
45. Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar (s. f.)
Colección y Fotografía
Fundación Museos Nacionales / Galería de Arte Nacional, Caracas D. C.
46.
Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar
(s. f.). Fotografía
Nelson Garrido (1998 p. 286) Colección
Robert y Ruth Bottome
Escaner de imagen Esp. Víctor A. Hernández
47. Gerardo Aguilera Silva (+)
Retrato
del Libertador (s. f.) Colección
Amanda de Calzadilla (Calzadilla,
1982 p. 292)
Escaner
de imagen Esp. Víctor A. Hernández
48. Gerardo Aguilera Silva (+)
Bolívar
(s. f.) Colección Margarita Liscano Fotografía Augusto Hernández (1993, p.
47)
Escaner
de imagen Esp. Víctor A. Hernández
49. Gerardo Aguilera Silva (+)
Retrato
de Bolívar (s. f.)Fotografía
Godofredo Romero (1975 p. 21) Escaner
de imagen
Esp. Víctor A. Hernández
Esp. Víctor A. Hernández
50. Perfecto
Aristóbulo Aguilera (Cantalicio +)
Muerte del Libertador
acaecida a los 47 años de edad (1998)
Maturín Edo. Monagas
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
51. Luis Méndez
La penumbra de la
confianza y de la libertad o de seguridad y de no confianza y de no libertad y
de no seguridad más que todo penumbra de lo legal o en lo legal (1992)
Fotografía Manuel Bas
Colección Arq.
Alfonso Sandoval, Barcelona, Edo. Anzoátegui
52. Luis Hernández
Bolívar (2003)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
53. Pablo Isidro
Duque (+)
Juramento de Bolívar
en el Chimborazo (2004)
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
MUESTRA VISUAL TRIDIMENSIONAL
1. Duglas Blanco
El niño Simón montado en su caballito
(2018)
Los Teques, Edo. Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
2. Duglas Blanco
El Primer caballito de Simón (2018)
Los Teques, Edo. Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
3. Jaime Rolingson
Simón Bolívar (2017)
Píritu, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
4. Alberto Manzanilla
Simón Bolívar (2007)
San Miguel D Boconó,
Edo. Trujillo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
5. Alberto Manzanilla
Simón Bolívar (2006)
San Miguel de Boconó,
Edo. Trujillo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
6. Miguel Pérez
S. Bolívar (2017)
Los Teques Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
7. José Rodríguez
Simón Bolívar (2018)
Los Teques Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
8. Ramón Linares
Simón Bolívar (2011)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
9. Bernardo
Valladares
Simón Bolívar (2008)
Boconó, Edo. Trujillo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
10. Ana Rosa Parra de Rangel
Simón Bolívar (2000)
La Baja Mucuy, Edo.
Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
11. Eduardo Rangel
Libertador Simón Bolívar
(2002)
Maracay, Edo. Aragua
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
12. José Luis Vargas
Simón Bolívar (2003)
Canoabo, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
13. Dominga Salazar / Milena del Valle
Henríquez
Miranda, Don Simón
Rodríguez (2017) / El Libertador (2015)
Cariaco / Río Caribe,
Edo. Sucre
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
14. Luis Torres
Bolívar (2003)
Caracas D. C.
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
15. Mary Herrera
Ofrenda a Bolívar
(2006)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
16. Mary Herrera
Simón Bolívar (2006)
Valencia, Edo
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
17. Víctor Contreras
Simón Bolívar (2004)
La Guanota, Edo
Monagas
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
18. Amelia de Carrero
Simón Bolívar (2006)
Bailadores, Edo.
Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
19. Glenda Garcés
El Precursor, El
Libertador y El Cantor del Pueblo (2017)
Moruy, Edo Falcón
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
20. Luis Acosta
Simón Bolívar a
caballo (s. f.)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
21. Luis Acosta
S. Bolívar (s. f.)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
22. Carlos Oliveros (hijo)
Simón Bolívar (2004)
Valencia, Edo
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
23. Juan Núñez (+)
Bolívar (2005)
Canoabo, Edo. Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
24. Julio Aguilera (+)
Simón Bolívar (s. f.)
Campo Alegre, Vía
Teresén, Edo. Monagas
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
25. Heriberto Belandria
S. B. (2006)
Llanitos de Tabay,
Edo. Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
26. José Márquez (+)
Simón Bolívar (s. f.)
Tovar, Edo. Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
27. José Luis Guaiquirima
Simón Bolívar (2003)
El Guariquero, Caigua,
Edo. Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
28. Rosalía Valero de Araujo
Simón y Manuela
(2012)
Altos de Escuque,
Edo. Trujillo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
29. Asia Betancourt / Natividad Caicuto
Bolívar (2011) /
Negra Hipólita (2009)
Ciudad Bolívar, Edo.
Bolívar / La Curbatera, Caigua, Edo. Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
30. Ricardo Cordero
Simón Bolívar (2004)
El Mirador, Caripe,
Edo. Monagas
Colección y fotografía
Manuel Bas, Caracas D. C.
31. Luis Eloy Maldonado
Simón Bolívar (2001)
Tabay, Edo. Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
32. Ana de Moreno
Simón Bolívar (2006)
La Baja Mucuy, Edo.
Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
33. Ramón Antonio
Moreno (+)
Simón Bolívar (2006)
Tabay, Edo. Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
34. Daysi Padilla
Simón Bolívar (2002)
Mérida, Edo. Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
35. Marcos Salazar
Simón Bolívar (2007)
La Guanota, Edo.
Monagas
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
36. Mario Calderón
El Libertador en su
caballo blanco (s. f.)
Mérida, Edo. Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
37. Ana Rosa Marquina
Simón Bolívar (2007)
La Baja Mucuy, Edo.
Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
38. Blanca Rangel
Simón Bolívar (2007)
La Baja Mucuy, Edo.
Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
39. Jesús Ricardo Acosta
Simón Bolívar (2011)
San Fernando de El
Guapo, Edo. Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
40. Pedro Caigua
Simón Bolívar (s. f.)
El Viñedo, Barcelona,
Edo. Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
41. Natividad Caicuto
Simón Bolívar (2010)
La Curbatera, Caigua,
Edo. Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
42. María Edicta La
Cruz
Bolívar, Manuel y
Nevado (s. f.)
La Mucuy Baja, Edo.
Mérida
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
43. Tomás Flores
Simón Bolívar (s. f.)
Canoabo, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
44. Omar Tayupo (+)
Estatua Ecuestre del
Libertador (2006)
Barcelona, Edo.
Anzoátegui
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
45.
Ramón Linares
Simón Bolívar (2011)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
46. Oswaldo Mora
Bolívar y María
Teresa (2010)
Valencia, Edo.
Carabobo
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
47. Simón Castillo (+)
Simón Bolívar (1995)
Naiguatá, Edo. Vargas
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
48. Francisco Núñez
Bolívar (2010)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
49.
Marcelino Almeida (El Hombre Orquesta +)
Bolívar (2011)
Los Teques, Edo.
Miranda
Colección y
fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
50. Miguel Pérez
La Coronela y El Libertador (2012)
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
50. Miguel Pérez
La Coronela y El Libertador (2012)
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
51. Miguel Pérez
Simón Bolívar (2011)
Colección y fotografía Manuel Bas, Caracas D. C.
*Manuel Bas. Barcelona, estado Anzoátegui, Venezuela, 1959. Profesor
Agregado, Universidad Nacional Experimental “Simón Rodríguez” (UNESR).
Pregrado: Licenciado en Educación Integral, Mención Ciencias Sociales, Mención
Cum Laude (UNESR). Postgrado: Especialista en Gerencia Educacional, Universidad
Pedagógica Experimental Libertador (UPEL). Magister Scientiarum en Tecnología y
Diseño Educativo (UNESR / Instituto
Tecnológico de Monterrey Universidad Virtual, México). Curso de Postgrado de
Ampliación: Comprensión de la Realidad Educativa Nacional y Ética de la
Profesión Docente (UNESR). Curso de Postgrado de Ampliación: Culturalidad
Africana Latinoamericana y Caribeña del Doctorado en Cultura y Arte para
América Latina y el Caribe, Instituto Pedagógico de Caracas (IPC). Tesista del
Doctorado en Cultura y Arte para América Latina y el Caribe (IPC).
SIMÓN BOLÍVAR EN EL
ALMA DEL PUEBLO IV
(HOMENAJE A GERARDO
AGUILERA SILVA)
POSTER ON LINE: Eduardo Palmera.
FOTOGRAFÍA: Manuel Bas.
AGRADECIMIENTO
MUY ESPECIAL A: VÍCTOR A. HERNÁNDEZ Y
DUGLAS BLANCO
EDICIÓN:
Manuel
Bas & Eduardo Palmera.
OBRAS DE LA COLECCIÓN MANUEL BAS DE ARTE POPULAR
VENEZOLANO
Caracas D. C., Venezuela, diciembre de 2018.
