martes, 19 de septiembre de 2017

Luiz Mendes Angustia y Posibilidad Sublime

                               Autorretrato (2006). Mixta / papel

"Oye, hermano, te llamo desde un muro; / clavado entre unas piedras / donde las sombras hacen su nidada / Hablo desde la pena. / Entre los huesos mismos del dolor te llamo. / Mi voz, como esas hierbas / que en la ranura de una roca crecen, / se han mantenido pura: / no escupió a su bandera, / ni doblegó sus hombros, / ni ha mentido canciones, / ni se pasó al Oscuro". (Marcos Ana, 1962).

"Y cuando llegue el día del último viaje y esté al partir la nave que nunca ha de tonar, me encontrareis a bordo, ligero de equipaje, casi desnudo, como los hijos del mar". (Antonio Machado, 1875-1938).

Angustia y Posibilidad Sublime

      Para comenzar este tema, necesito emular lo expresado por los artistas alemanes de Die Brücke (El Puente) quienes dan comienzo a la corriente expresionista en el arte, que lo fundamental de la pintura es expresar los sentimientos, obedecer al puro instinto, rechazando de plano a toda fijación teórica. Para ellos, el color es un elemento ardiente, caudaloso, agitado, cargado de las observaciones muy personales y subjetivas; o de las vagas representaciones que intentan hacer de las remanencias arcaicas planteadas por Carlos Gustavo Jung (estados psíquicos y vitales) que se remontan a la aurora de los primigenios habitantes de la Tierra de las distintas épocas y culturas de la humanidad, sin proponerse imitar el arte de aquellos tiempos. Estas son las fuentes, en muy apretadas líneas del arte expresionista como parte de las llamadas “vanguardias históricas”, que no es más en esencia un concepto teórico, una propuesta ideológica; no un programa colectivo. Este es, en líneas muy generales, el fundamento de este movimiento, al igual al planteamiento de Luís Méndez o Luiz Mendes, como suele firmas sus obras como seudónimo artístico.
      Naturalmente, la pintura de Méndez aborda (lo  simbólico, lo social, lo antagónico del mundo, el hombre, Dios, el destino humano, lo mítico, [temas diversos]) ya planteado en Grecia arcaica y clásica por los helenos y los griegos desde Tales de Mileto pasando  por la polis de Pericles  hasta el último bastión de la  filosofía griega  consumada por Amonio Saccas  y sus discípulos Plotino, Longino, Porfirio y Erenio (el teodidacto). Lo mítico representa una forma [no toda] de expresión del dilema del hombre en torno a Dios y al Cosmos, una simbología que de alguna manera representa todo el legado de la cultura que sabiamente representaron Homero y Hesíodo entre los poetas de la Hélade, y con atino más racional Heráclito, Empédocles y Parménides, entre los filosofantes. En estos autores existe una fuente de primera mano para abordar el problema de la existencia humana, del bien y del mal, y del destino del hombre, constituidos en uno de los grandes problemas éticos de la humanidad, que naturalmente Luís Méndez aborda en sus pinturas.
     En este orden de pensamiento, Heráclito  “El Oscuro” (circa 535-484 a. C.) postula que la esencia del mundo consiste en una permanente tensión  de contrarios en constante cambio, todas las cosas tienen su contrario (noche-día, caliente-frío, vida-muerte); es decir lo que Él denomina el devenir y la mutación constante. De esta postura antagónica (teoría de los contrarios) Marx y Hegel construyeron su dialéctica de la historia. Por su parte Parménides de Elea (540-470 a. C.) con un lenguaje simbólico plantea como tema central de su filosofía la búsqueda de la verdad, la diosa Dike le enseña los dos caminos: el de la verdad (Aletheia) y el de la falsa opinión (Doxa), centrándose en el “ser” o “ente” el cual lo lleva negar la pluralidad y al movimiento. Para Empédocles (490-430 a. C.) el (arjé) o principio es el amor con su contrapartida el odio, que actúan con alternancia eterna; así encadena dos posiciones alternas entre sí: nacer y perecer de las cosas, (verbi gratia) como el giro de una rueda alrededor de un cubo. De estos planteamientos se deduce a priori que la realidad es dual, una que vemos y otra que no; pero de mayor trascendencia. Aunque Parménides insiste en la unidad como elemento primario de su filosofía del "ser" como la primera causa de todas las cosas de las que vemos y no vemos ¿Acaso Dios?
     Estos aspectos generales que esgrimo en líneas precedentes, a manera de introducción  con relación a lo mítico del mundo griego como parte de su “paideia” constituyen uno de los elementos que Luís Méndez aborda en sus pinturas. Sus pinturas son una reflexión filosófica pero desde la imagen, que es, al propio tiempo su cosmovisión del mundo, de su mundo interior expresados de manera dualista con una gran connotación existencialista que expresa además un planteamiento mítico de la vida, que como todo mito se traduce en símbolo, al que se le puede hacer muchas lecturas.
     En el sentido de la génesis de la existencia humana la base de soporte es la dualidad que va en busca de la unidad perdida de la que habla Parménides, y planteado por Platón más tarde en su libro “El  Banquete” donde nos ilustra esa dualidad, esas dos mitades pérdidas y descarriadas, desentendidas la una de la otra, totalmente opuestas (en apariencia), cuyo fin fundamental tanto en Parménides como en Luís Méndez es recobrar la unidad o arjé existencial, es decir el reencuentro de esas dos mitades, para conformar la unidad, y la armonía del Universo. En este sentido, el propósito de este extraño pintor es simbolizar el reencuentro del hombre con Dios. De modo que Méndez reflexiona en sus pinturas sobre los elementos universales, que en definitiva es lo que plantea en su “expresionismo simbólico”.
     Estos aspectos generales que Luís Méndez expresa en sus pinturas, que se pueden particularizar, para didácticamente explicar [parcialmente] aspectos esenciales de ella, son: lo emotivo, lo existencial, lo absurdo, lo caótico, lo infernal, lo nacional, la injusticia que en definitiva trata de reflejar en sus pinturas, con un ímpetu gestual, intuitivo, compulsivo; escenas teatralizadas de gran contenido dramático y desolador de la existencia humana. Para Él, al igual que Schopenhauer ([“la vida es una broma pesada”] y Sartre [“la vida es una nausea"]); porque la humanidad de hoy, en la que vive el pintor, también ha vivido y Él  en carne viva el infortunio, la angustia exaltada, el horror en un mundo de antagonismo y de injusticias.
     Para acercarnos a sus pinturas es necesario plantear como tema para el análisis, su vida trágica seguida de infortunios vividos (ha estado cerca de la muerte varias veces), además de su asma crónica que lo angustia persistentemente, de allí que sus obras tengan esa fuerte connotación trágica. Pero a pesar de su vida desventurada Luiz Mendes renace como el ave fénix, presentando al mundo una obra tensa, trágica, mítica que no tiene homólogo en el arte venezolano, sus pinturas aunque muy personales, arrastran una visión universal, o pluriversal como diría Enrique Dussel, que hace pensar al espectador que no pareciera vivir en el entorno donde habita (barrio Guamachito de Barcelona, Edo. Anzoátegui). Él reelabora los grandes problemas de la existencia humana de constante histórica, tales como la del bien y del mal. Sus pinturas no pueden y no se deben valorar desde la visión ortodoxa de la estética convencional que la gente denomina “bello”; porque en Él (lo bello) como en Edvard Munch no es importante, pues para el artista expresionista, la estética es una fuerza vital para sacudir las emociones humanas, para conmover, en tal sentido, más que  un arte para mirar es un arte para sentirlo y vivirlo.
     Encontramos en el arte de Méndez la representación de valores y contravalores: justicia-injusticia, bien-mal, venezolanidad-antivenezolanidad, rasgos de una metafísica del ser que con tono agudo de crítica social de un mundo (y su entorno) que está sumido en los antivalores, donde el mal debe ser restituido por el orden, la justicia, la paz, la verdad […]. Y esto se justifica porque desde su posición de hombre infortunado (pero no en el arte), de hombre disminuido socialmente hablando (no como pintor), pobre, toma como bandera una empresa “quijotesca” de emplear sus cuadros para plantear en tono de crítica social lo infernal del mundo, e intentar restituir la justicia, y al propio tiempo escapar Él de su situación trágica en que vive, como vive también el resto del mundo. Emula naturalmente un ideal cercano al de Don Quijote cuyo propósito es de enderezar los entuertos de la humanidad.
     No olvidemos que en la Grecia Clásica, Esquilo nos dejó reflejado en sus obras que lo trágico es un componente esencial de la condición humana, porque todos definitivamente morimos, sin embargo, el obrar bien decía Sócrates es trascender a la muerte. De tal manera la muerte es un componente ineludible que mueve ese antagonismo perenne de la existencia humana, trasmutando la angustia, como lo hace Luís Méndez, en posibilidad sublime, para recorrer la senda de la vida de manera estoica. Desde este punto de vista la obra de Méndez, propone un camino de crítica social para intentar librar del infortunio, de la frustración, de la atormentada vida, a la sociedad actual; y librarse Él Mismo: y salvarse, Él y la Humanidad.
     Este pintor ve en la iconografía de Cristo y Bolívar ideas de las que Él se apropia para transmutarlas en un especie de héroe (no de las tiras cómicas) que denomina  “Súpermártir” [no Supermán], que tal vez es (Él Mismo) como una manera de redimir a los seres humanos de lo infernal del mundo. Su nacionalismo bolivariano —no chavista, incluso antes del chavismo—, la iconografía de la bandera nacional y otros pabellones de su invención aparecen en sus pinturas como su tesis para combatir los grandes embates de la existencia humana. Es probable que la idea de Jesucristo en sus pinturas encarne un mensaje (no evangélico) como un antídoto para soportar el martirio que vive la humanidad cuya raíz en muchos casos es la injusticia; y es de esta manera que su obra se transforma en un arte de excepcional calidad plástica.
     Luís Méndez ha encontrado un recurso expresivo dentro de lo mítico y simbólico para expresar de manera antagónica la realidad humana, verbi gratia: el Sol y la Luna; símbolos estos que aparecen desde tiempos inmemoriales en las antiquísimas civilizaciones de Mesopotamia y Egipto viniendo a representar ese sentido dual de la naturaleza humana, del mundo y del ser: espíritu y materia, el eterno femenino y masculino, el yin y  yan, que constituyen esa unidad fundamental  o mónada, es decir la causa primigenia de la existencia, o el alma del mundo o Súper-Alma de Emerson. Otro de sus símbolos es la esfera, considerada por los pitagóricos y Platón como la figura geométrica más perfecta creada por el Demiurgo, el arquetipo de las formas, es decir, la esencia de donde emanan todas las formas posibles. Profundizando este punto, los griegos representaban esta dualidad humana con dos personajes legendarios antagónicos: Apolo y Dionisio. El primero representa el orden, el equilibrio; mientras que el segundo el caos, el desequilibrio; los dos aspectos esenciales de la condición humana: racionalidad e irracionalidad. En este sentido la tarea fundamental de la Philosophía es superar la irracionalidad, decía Sócrates.
     Este antagonismo de la naturaleza humana, o por mejor decir, esta dualidad, conlleva una lucha titánica por mantener el equilibrio de la naturaleza humana, la razón intenta subyugar a la sinrazón, para lograr la paz espiritual. De allí que Aristóteles afirmara que lo racional (ratio) trata de armonizar en el hombre los bajos instintos para no hacerlo más vulnerable al destino. En este contexto, el destino ha sido duro con Méndez, al extremo que lo invalidó, lo postró en una cama, prácticamente lo destruyó. Su vida llena de infortunios y desventurada ha influenciado a sus pinturas, concretando una obra teatralizada donde aparecen personajes en escenas que reflejan su vida trágica, cargada de fatalismo; sin embargo, hay en el pintor un sentimiento erótico, que lo impulsa hacia la creación artística, un sentimiento freudiano que le da sentido a su vida dentro de tantos desvaríos y huir de Tanatos (muerte) lo que le ha permitido crear una de las obras más auténticas del arte venezolano y de excepcional calidad plástica.
     Recordemos que en la mitología griega existen dos espíritus antagónicos  que vienen a formar parte de la existencia humana: Eros y Tanatos. Eros significa la vida, el amor, mientras que Tanatos el odio, la muerte; desde estas dos vertiente parte la obra de Méndez, es la manera que ha encontrado el artista para no sucumbir frente al destino adverso en que vive. Es, no obstante una profunda reflexión sobre la existencia humana, su obra está más allá del bien y del mal, tomando esta frase de Nietzsche. La obra de este barcelonés expresa un planteamiento metafísico y existencial del hombre como ser trágico que busca en lo más arcano de su alma a Dios para redimir sus penas. Esto, es un renacer como el del ave Fénix, una capacidad alterna como dirían los psicólogos, una especie de ley de compensación. No olvidemos que Méndez perdió temporalmente el habla a raíz de un arrollamiento vehicular, además de esto tiene limitaciones físicas motivado por un asma con que tiene que luchar cada día, y que en algunos casos ha estado a punto de morir.
     Este cuadro dantesco de su vida es sobrepuesto a través de una voluntad inquebrantable en la que ha encontrado en la pintura remedio, la posibilidad de transmutar la angustia existencial en arte, en una estética no convencional en la que su inspiración es su tragedia misma, por ello es una estética que trasciende todo sufrimiento humano. Su obra es de alguna manera la “síntesis de su tragedia”, que expresa de manera enigmática y oscura en símbolos, iconos y con un ardiente color cargado de sentimiento trágico, mítico y místico de la vida.
    Esto de algún modo explica el empleo de técnicas plásticas: instintiva, gestual, compulsiva; que no tiene que ver con el arte ortodoxo, apoyadas en texturas y en el empleo de colores sucios marcada por la intuición del color, con la que expresa un sentimiento exaltado, sombrío, conmovedor, contrastante; con un lenguaje tricromo acompañado con una grafía que viene a ser cada vez más en el tiempo el complemento de su obra, con la que ha logrado crear una atmósfera de gran dramatismo y trágica en la que los personajes de su obra se ven en franco desamparo frente al destino. El color, en este particular es un elemento ardiente, íntimo, conmovedor con lo que expresa un momento desolador, que pone, no sólo a Él, sino a la naturaleza humana, en recuerdo de la vulnerabilidad del género humano. En este sentido su condición física y psicológica influye en la intensidad  de su obra lo que le da cierta particularidad a su estilo pictórico.
     Además del color, el artista se sirve de símbolos tales como: el árbol de manzana que simboliza en la tradición cristiana el pecado, la bandera nacional —y otras banderas, algunas de ellas de su invención—, la crucifixión, de Bolívar, el Sol y la Luna, personajes grotescos que nos recuerdan al artista, en escenarios cargado de excesivo dramatismo. Bolívar y Cristo, de algún modo encarnan la dual justicia del Cielo y la Tierra. A través de estos personajes, nuestro extraño pintor intenta poner orden, llamar la atención acerca de las injusticias del mundo, el drama de la existencia humana llena de contradicciones y sinrazones, de un mundo al revés, como diría Albert Camus.
     De modo que sus pinturas expresan una sed infatigable de cuestionamiento del mundo que lo circunda, de una búsqueda del sentido de la vida, aunque sabe que el mundo en que el vive y nosotros también es el infierno de Dante, la náusea de Sartre; una especie de “caja de Pandora”, (Pandora en griego, desgracia de la humanidad) donde se encuentran todos los males de la humanidad; pero, paradójicamente como su creación artística, en el fondo de la mítica caja, se encuentra la esperanza que lo salva a Él y al Mundo, su pintura es su esperanza; esa mítica virtud que el poeta Hesíodo retrata en su obra “Trabajo y Días” que queda en el fondo del ánfora cuando Pandora  abrió la caja y liberó todos los males de la humanidad. La esperanza viene a representar una especie de salvación de la condición humana para no sucumbir frente al destino.
     Otro recurso que emplea en su particular pintura es el grafismo que aparece en el reverso de la obra, y en algunos casos en el cuadro, que con el correr del tiempo se han convertido en un discurso cada vez más extenso. Este caso nos recuerda a Pablo Millán en Margarita y a Adrián José Pérez (Grone Romepri) a quien conocí en El Tocuyo, estado Lara. Sobre este recurso estético la crítica de arte no ha dado en mi opinión, una explicación clara que arroje luces explicativas, algunos han pensado que es un poema que el autor le agrega a la obra y que no guarda relación con la pintura, lo que si queda claro la curiosidad que siente la gente cuando mira una pintura ver su revés. Otras personas consideran que es una perogrullada de palabras que sí tiene vinculación con la pintura pero que es difícil explicar. Lo cierto es que no hay un estudio serio sobre este particular.
     El autor del presente ensayo para intentar aclarar este asunto, empleó una metodología que consistió en establecer una cronología a lo largo de las exposiciones colectivas e individuales en las que ha participado el pintor para revisar los títulos por él asignado a sus pinturas, y colecciones privadas, lo que me permitió afirmar que en su etapa de los años 70 y 80 los títulos son cortos, escuetos; a partir de los años noventa comienzan a aparecer los títulos largos, lo que demuestra un progresivo interés por parte del artista de complementar la obra con la palabra escrita con una carga altamente subjetiva. En la obra del pintor hay una simbiosis de la imagen y la palabra escrita que además de lo simbólico la sumerge en profundo hieratismo, en definitiva grafismo e imagen son dos aspectos complementarios, unitario de su creación artística.
     No olvidemos que desde Saussure (padre de la lingüística estructural) se postuló que los objetos y el mundo de las cosas cuando se asimilan al lenguaje tienen dos componentes esenciales: significado (imagen fónica o acústica) y el significante (componente material o imagen material) a la que nos referimos con las palabras. Visto desde esta perspectiva es que podemos comprender lo que el pintor quiere expresar, no sin quitarle la carga [subjetiva-emotiva-expresiva]; no hay que perder de vista de que Méndez es un pintor expresionista donde el sentimiento tiene un peso específico en cada una de sus creaciones.
     En todo caso, Luiz Mendes como pintor expresionista trata de expresar a través de la imagen visual y la palabra escrita sus sentimientos y emociones, y es desde esta óptica es que hay que reflexionar sus pinturas, necesitamos de un caleidoscopio para poderlas descifrarlas y comprenderlas. El interés del espectador por su pintura y por lo que le escribe lo cautivan, lo que viene a representar en su pintura cierto valor plástico y relación entre la imagen y la palabra escrita que viene a constituir además de un mensaje el título del cuadro; el cuadro mismo es un mensaje. Es tanto así, que en la exposición “Herido de Sombras” llevada a cabo en la Sala Cultural PDVSA, Puerto La Cruz, estado Anzoátegui, en Mayo de 2001, a la que yo asistí, Alberto Asprino, quien desarrolló el guión museográfico me comentó que por los interesantes escritos que el artista le escribía a cada obra y por interés muy peculiar de los espectadores por los mismos se vio obligado en suspender en el aire gran parte de las pinturas para que el público pudiera leer lo escrito por Luís Méndez; en el catálogo de la muestra las obras fueron fotografiadas por las dos caras para que se pudiera leer el escrito que le colocó el artista. En conclusión el escrito forma parte de la obra.
    Sus obras se encuadran por una parte, dentro de lo que pudiéramos denominar expresionismo figurativo con  un marcado simbolismo caracterizado por una carga psicológica de sus estados interiores, con un deliberado énfasis por valorar los contenidos que subyacen en los personajes (lo íntimo, la angustia) expresándose así mismo junto con actividades emocionales de los Otros y del Mundo. Otras de sus producciones se contextualizan  dentro del expresionismo abstracto donde se transcriben los productos de la pintura como signos más emotivos que comunicativos, donde pone de relieve su carga de subjetividad que se corporiza en el en el trazo gestual, en la pincelada intuitiva y suelta, agresiva y fuerte. En las formas se concentran  valores cromáticos que sacan a flote una formulación nerviosa, libre y espontánea. La virulencia explosiva y encrespada de su emotividad exacerbada la representa a través de un código pictórico de sugestiones atmosféricas con un marcado propósito de independencia y sin ataduras al arte ortodoxo ni a los lineamientos establecidos convencionalmente.
     Advierto, para finalizar que las categorizaciones expresadas por en este trabajo, solo hay que entenderlo bajo estricto criterio didáctico para señalar algunas particularidades de las pinturas de Luís Méndez, pues estas no encuadran dentro de lo que pudiéramos llamar "arte ortodoxo". No tenemos en nuestro arte venezolano un caso igual al de Méndez ni en la pintura colonial, ni republicana, ni en el arte moderno, vanguardias y contemporáneo, aunque si renovadores como Cabré, Reverón, Narváez, Carvallo; apuntalado más bien hacia una concepción estrictamente estética y de los aspectos que tienen que ver con el color, pero una obra en la que se emplee el color para expresar los sufrimiento del alma, el sentimiento y el pensamiento, es Luís Méndez, quien no como otro pintor lo ha logrado, estoy seguro que esto va a ser su gran legado de Él y de su pintura [...].

Breve Reseña Biográfica

      Una madrugada del 21 de junio de 1950 en una casa ubicada en Barcelona, frente donde en un tiempo pasaba la línea del ferrocarril Naricual-Guanta, estado Anzoátegui, Venezuela, conocida hoy como calle La Línea del sector Guamachito, nace de la unión matrimonial de Daniel Fermín y Felicita Méndez de Fermín, un niño que lleva por nombre Luís Rafael, su madre fue asistida en el parto en su casa por la comadrona (partera) Guillermina Escobar. Luís es el cuarto de nueve hijos: cuatro varones y cinco hembras, dos de ellas murieron siendo niñas.
     Cuando Luís cumplió cinco años de edad, su educación estuvo a cargo de la maestra Cándida Salcedo, vecina de la familia Fermín-Méndez. Un año después, Luís pasó bajo la tutela escolar del maestro vecino suyo: Quintín Gutiérrez. Con Gutiérrez estuvo dos años recibiendo clases hasta completar su preparación para el ingreso a la escuela primaria, la cual inició en el Grupo Escolar Estadal “José Antonio Anzoátegui”, del barrio Portugal Arriba en la capital del Estado, y fue inscrito por el mismo Quintín Gutiérrez, a petición de su madre. (Felicita Méndez de Fermín, entrevista personal, febrero  20, 2001).
     A los ocho años de vida ingresó en la escuela. Desde esos tiempos, lo testifica Felicita, Luís tenía inclinación por el dibujo, colaboraba con la realización de las carteleras en la escuela y a sus compañeros de clase. La primaria la terminó relativamente tarde, por dos razones: Luís comenzó la educación primaria a los 8 años y fue aplazado dos veces: en cuarto y quinto grado, por lo cual terminó la primaria a los 16 años de edad. Luego de haber recibido el certificado de primaria, realizó estudios de albañilería  y contabilidad en el INCE y un curso de inglés por correspondencia en la Academia Americana. Se vio obligado interrumpir sus estudios de bachillerato debido a dos accidentes que padeció.
     A finales de los sesenta, Luís Méndez vivía en la Calle Rocal del barrio El Espejo de Barcelona. Por aquella época unos de sus grandes anhelos  era formar un grupo de rock, para lo cual se dispuso comprar una guitarra española, y con lo poco que aprendió del curso de inglés decidió interpretar las canciones de The Beatles y The Rolling Stones, grupos de vanguardia en los años sesenta. Se deja crecer el pelo a la manera de los astros del pop, y juntos con otros compañeros formaron una banda de rock.
     Hacia 1968, el artista contaba con 18 años de edad, trabajaba de obrero en la fábrica de caramelos “Cónica”, ubicada en sector Barrio Sucre limítrofe con  el lugar donde residía. Cuando llevaba varios meses trabajando allí, la desgracia tocó su puerta, sufrió quemaduras de primer grado al venírsele encima un caldero de caramelo hirviente en sus manos y brazos lo que ameritó hacerle cirugía en injertos. A raíz de este accidente perdió gran parte de su motricidad, que nunca recobró por completo. Este accidente causó en Luís Méndez frustraciones, pues no pudo tocar más la guitarra, y su sueño de ser músico hasta allí llegó. (Luís Méndez, entrevista personal, febrero 20, 2001).
      Después de esta desventura, poco más de un año, nuevamente la tragedia tocaría una vez más su vida. En 1970, un primero de mayo, Día del Trabajador, Méndez se encontraba en el Ministerio de Obras Públicas (MOP), ubicado en el sector Las Garzas de Barcelona celebrando dicho día, una vez culminada la celebración, el pintor decidió regresar a su casa cuando fue arrollado por un vehículo, el accidente lo dejó inconsciente y en vida vegetativa por varios largos meses, lo mantenían con suero, con el tiempo la comida se la daban por la nariz. Un día despertó, pero quedó postrado en una silla de ruedas. El médico le dijo a los familiares de Méndez que había pocas esperanzas de que se recuperase del accidente completamente. Los familiares, por recomendación del médico tratante, solicitaron asistencia médica en el Hospital Universitario de Caracas, en el que el artista fue paciente hasta 1976. En este centro de salud recibió la atención necesaria y poco a poco se rehabilitó. En el tiempo de convalecencia la familia regresó a la casa de la calle La Línea, donde había nacido. (Felicita Méndez de Fermín, entrevista personal, febrero 25, 2001). Quién escribe tuvo la oportunidad de ver las tarjetas de las citas del Hospital Vargas.
    A pesar de su recuperación, el pintor quedó postrado en una silla de ruedas, motivo por el cual se encontraba triste, desanimado, un día como pudo se puso de pie contra todo pronóstico médico. Esta situación en que se hallaba fue lo que motivó en él el interés por la pintura. Por esa época tenía 22 años de edad. Su primer cuadro que pintó lo tituló “Dios está en todas partes”. En esta obra según su autor aparecen las estrellas, los planetas, la naturaleza, como una simbología de la presencia de Dios, una especie de expresión panteísta del Creador. Posteriormente, pintó otro cuadro titulado “Mi Bella Dama”, su segunda obra pintada, la cual se la regaló a su amigo Oscar Leal, vecino del barrio El Espejo y unos de los miembros del grupo de rock que habían formado hace algún tiempo. Realizó otras pinturas que se las dio a su hermano Freddy (El Pavo) para que las vendiera, hasta entonces no había participado en exposición alguna. (Luís Méndez, entrevista personal, 2001 Febrero, 26). En una oportunidad sostuve una conversación con Leal en relación a esta pintura mi Bella Dama y me manifestó que se le había dañado y la habían votado.
     En 1975 pasó en frente al Ateneo “Miguel Otero Silva” de Barcelona, se asomó como un profano a la sala de exposiciones y contempló los cuadros colgado de las paredes, y soñó con algún día participar en una exposición. Meses después, escuchó por radio invitando a los pintores a participar en el Primer Salón Nororiental de Pintura Ateneo de Barcelona. (Luís Méndez, entrevista personal, 2001 Febrero, 26). Este certamen fue llevado a cabo en la misma institución convocante, organizado por su Coordinador Freddy Pereira efectuado entre el 24 de julio al 10 de agosto de ese año con el patrocino de las Fuerzas Armadas de Cooperación (FAC), Comando Regional Nº 7, con el fin de proyectar los valores plásticos de la región.
     A  esta convocatoria expositiva llevó tres cuadros y sólo le aceptaron uno. El cuadro aceptado, titulado “Paradoja”, una vez terminado, se le cayó y se le dañó, tuvo que retocarlo, prácticamente rehacerlo. Esta obra es muy curiosa, en ella se observa una persona casi demente, presa en una cárcel asomada por una ventana con barrotes de una cárcel. Es una pintura hecha con colores oscuros, tensa, sombría, de un dramatismo excepcional en la que expresa  la gran contradicción en la que vive el hombre que nació para ser libre, sin embargo está privado de libertad. (Luís Méndez, entrevista personal, 2001 Febrero, 26).  A partir de entonces comenzó  a enviar sus cuadros a los salones de arte. Al año siguiente, la institución museística, por la sensación que causó su “Paradoja”, el Ateneo bajo la coordinación de Freddy Pereyra le organizó su primera muestra individual, el texto del catálogo, lo escribió el mismo Pereira.
     En esta muestra Expuso las siguientes obras: Alegoría, Vía Crucis, Predominio, Conciencia, Ilusión, Albedrío, Pensamiento, Peyorativo, Clarividencia, Claustrofobia, Conservetudinosio, Junto a la vida, Pecunario, Comprensión, No Somos estos Cuerpos, Mundología, Belicismo, Postguerra, Panteísmo, Sistema, Vanidad, Cultivo de Madre, La “Verdad” Desnuda.  De esta exposición nos queda, el sabio testimonio escrito en el texto del catálogo de Freddy Pereira (1976): “… estos  cuadros de aspecto y ambiente desolador nos reflejan  huellas vitales de angustia poderosa y descarnado sufrimiento, no sin razón, pues la vida de este extraño pintor ha sido marcada en su profundidad por lo adverso del destino”. (p. s/n.). Este es el primer texto crítico que se escribió sobre Luís Méndez, en la que Pereira, haciendo justicia a su opinión sobre el artista, pronosticaba la alta calidad de su obra, inclusive antes de Perán Erminy, y contrario a lo que pensaba la mayor parte de la gente que las calificaban de “feas”, y que no hubo en ese entonces personas que no valoraran su trabajo.

Datos Biográficos Cronología de Exposiciones

     1950. Luís Rafael Fermín Méndez (Luiz Mendes o Luís Méndez) nació en la calle La Línea del  barrio Guamachito, Parroquia El Carmen, municipio “Simón Bolívar, estado Anzoátegui, Venezuela. Es el cuarto hijo de nueve, cuatro varones  cinco hembras de las cuales dos murieron aun siendo niñas, de la unión matrimonial de Daniel Fermín y Felicita Méndez. Fue asistida en el parto en su misma casa por la comadrona (partera) Guillermina Escobar. Sus primeros maestros fueron Cándida Salcedo y Quintín Gutiérrez

     1955. A los cinco años de edad comienza a asistir a la escuela de Cándida Salcedo, vecina del barrio Guamachito.

     1956. Asiste a la escuela del maestro Quintín Gutiérrez.

     1958. El maestro Quintín Gutiérrez, a petición de los padres de Luís Méndez lo inscribe en el Grupo Escolar Estadal “José Antonio Anzoátegui”, ubicada en el barrio Portugal Arriba de Barcelona.

     1966. Termina la Educación Primaria, en el Grupo Escolar Estadal “José Antonio Anzoátegui”, algo tarde porque el pintor fue aplazado y tuvo que repetir en cuarto y quinto grado.

     1967. Se inscribió en el Instituto de Capacitación y Cooperación Educativa (INCE) en los cursos de Contabilidad y Albañilería. Ese mismo año estudia Inglés por correspondencia en la Academia Americana de Caracas. Funda un grupo de rock junto a su amigo Oscar Leal. Ese año su familia se domicilia en  la calle Rocal del barrio El Espejo.

     1968. Trabaja en la Fábrica de Caramelos Cónica ubicada en Barrio Sucre de Barcelona. Ese año sufre el accidente al caerle en manos y brazos caramelo hirviente que ocasionó quemaduras de primer grado, perdiendo gran parte de su motricidad en las manos. A consecuencia de ello deja la banda de rock por no poder tocar más la guitarra.

     1970. El Primero de Mayo Día del Trabajador se encontraba en el Ministerio de Obras Públicas Estadales (MOP), sector Las Garzas, Barcelona, cuando salía de esta institución fue arrollado por un vehículo. A raíz del accidente estuvo tres meses inconsciente, y hasta 1972 en sillas de ruedas. Desde este año hasta 1975 fue paciente del Hospital Universitario “José María Vargas” de Caracas, como se puede constatar en la tarjeta de consulta médica, que el artista conserva de esta institución hospitalaria.

     1972. Pintas sus  primeras obras: “Dios está en todas partes” y “Mi Bella Dama”, está última se la obsequió a su amigo Oscar Leal. Pinta otras obras que se las dio a su hermano Freddy (El Pavo) para que las vendiera.

     1973. Se residencia nuevamente en la casa de la calle La Línea del barrio Guamachito de Barcelona. Este año comienza su terapia de rehabilitación en el Hospital Universitario “José María Vargas” de Caracas. Debido a este tratamiento su salud mejora sustancialmente.

     1975. Culmina la terapia de rehabilitación en el Hospital Universitario “José María Vargas” de Caracas. Participa en el Primer Salón Nororiental de Pintura Ateneo de Barcelona. Ateneo “Miguel Otero Silva”, Barcelona, estado Anzoátegui, con la obra “Paradoja”.

     1976. Realiza su primera exposición individual titulada: Luís Méndez, en el Ateneo “Miguel Otero Silva”, Barcelona, auspiciado por la Coordinación de Cultura de la Gobernación del Estado Anzoátegui. El texto del catálogo fue escrito por Freddy Pereira, De esta exposición nos queda, en el texto del catálogo el testimonio de Freddy Pereira: “… estos  cuadros de aspecto y ambiente desolador nos reflejan  huellas vitales de angustia poderosa y descarnado sufrimiento, no sin razón, pues la vida de este extraño pintor ha sido marcada en su profundidad por lo adverso del destino”.

     1977. Participa en dos muestras individual: El Increíble Mundo de Luís Méndez, Instituto Nacional de Parques (INPARQUE), Caracas-Venezuela. Y Luís Méndez, Centro Juvenil La Dolorita, Petare, estado Miranda-Venezuela.

     1978. Participa en la exposición colectiva “Presencia de los Estados”, FUNDARTE, Caracas-Venezuela

     1979. Participa en las siguientes exposiciones: “El Mundo de lo Sobrenatural” en homenaje a Carlos Contramaestre por su libro “Mi Danza del Encanto", Museo Emilio Boggio, organizada por el Concejo Municipal del Distrito Federal, Caracas-Venezuela. “Luís Méndez”, muestra individual, Galería Municipal de Arte Moderno, Puerto La Cruz, estado Anzoátegui-Venezuela. “Luís Méndez”, muestra individual, Palacio Municipal de Caracas, Caracas-Venezuela. Y Luís Méndez, muestra individual, Centro Humanístico Arístides Bastidas de la Cooperación CACECE, Caracas-Venezuela.

     1980. Participa en las siguientes exposiciones: Luiz Mendes, Pinturas, muestra individual, Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”/Dirección de Cultura de la Gobernación del Estado Anzoátegui-Venezuela. El Mundo de lo Sobrenatural, muestra individual, Gobernación del Distrito Federal, Caracas-Venezuela. Y Primer Salón de Pintura Ingenua Fundarte. Casa Guipuzcoana, La Guaira-Venezuela.

     1981. Participa en la Primera Bienal Regional de Artes Plásticas, Galería Municipal de Arte Moderno Puerto La Cruz, Concejo Municipal del Distrito “Juan Antonio Sotillo”, Puerto La Cruz, estado Anzoátegui-Venezuela. Y “Pintura Venezolana”. Exposición Permanente. Galería de Arte La Marina, entro Comercial CADA, Puerto La Cruz, estado Anzoátegui-Venezuela.

     1982. Participó en las siguientes exposiciones: Primera Bienal de Arte Popular Ateneo de Barcelona, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. Luís Méndez. Sindicato de la Salud, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. II Salón de Artes Plásticas V Semana de MINDUR. Museo Anzoátegui/Dirección de Cultura, Gobernación del Estado Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui (Mención Honorífica). Oriente en el Arte. Segunda Jornada Nacional de Mantenimiento. Galería de Arte Aeropuerto Internacional José Antonio Anzoátegui, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela.

     1983. Participó en los siguientes eventos expositivos: Nueva Visión de la Imagen de El Libertador Simón Bolívar. Museo Anzoátegui/Dirección de Cultura de la Gobernación del Estado Anzoátegui. Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela (Mención Honorífica por las obras: Posteridad Eterna de El Libertador, y El Cuadro y el Libro del Libertador). Luís Méndez. Pinturas. Muestra individual. Museo Anzoátegui/Dirección de Cultura de la Gobernación del Estado Anzoátegui. Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. Primer Salón Popular de Artes Visuales, homenaje al Libertador en el Bicentenario de su Nacimiento. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”/Patronato de Feria. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1984. Este año participó en las siguientes exposiciones: Los Artistas Plásticos de Sur-Oriente Venezolano. Sala de Exposiciones Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui, Palacio Legislativo, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. Exposición Pictórica Colectiva XVI Aniversario Club de Leones Pozuelos. Club de Leones Pozuelos, Puerto La Cruz, estado Anzoátegui-Venezuela. Segunda Bienal Regional de Artes Plásticas. Año Centenario “Don Rómulo Gallegos”. Homenaje al General José Antonio Anzoátegui. Galería Municipal de Arte Moderno Puerto La Cruz. Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui (Premio Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui, Especialidad Pintura por las obras: Deflagrar Universal Celestial, y Río por mi Casa o por lo Bueno o por lo Malo). Colectiva de Nóveles Pintores. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”. Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. Expresionismo Mágico de Luís Méndez. Muestra individual. Galería Armando Reverón, Escuela de Artes Plásticas “Armando Reverón”, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. Pintores Orientales. Galería de Artes de la Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui. Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. 40 Años del Círculo de Reporteros Gráficos de Venezuela. Colegio Nacional del Periodista, Seccional Anzoátegui, Casa del Periodista, Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1987. III Semana Cultural. Colectiva homenaje a José Antonio Anzoátegui. Pintores Regionales. Dirección de Cultura de la Gobernación del Estado Anzoátegui/Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”, Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1988. IV Semana Cultural del Estado Anzoátegui homenaje a José Antonio Anzoátegui. Exposición de Pintores Regionales. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela. II Bienal Nacional “Salvador Valero” de Arte Popular. Museo de Arte Popular de Occidente Salvador Valero/Universidad de Los Andes. Trujillo, estado Trujillo-Venezuela. Barcelona Parte I. Artistas Populares. Concejo Municipal Municipio Autónomo Simón Bolívar, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela.

     1989. IV Bienal Regional de Artes Plásticas Galería Municipal de Arte Moderno Puerto La Cruz. Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1990. Todos los Artistas Todos los Espacios homenaje a Eduardo Lezama. Asociación Venezolana de Artistas Plásticos. Semana Aniversario. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”/Galería Aeropuerto “General de Divisiones José Antonio Anzoátegui”., Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela.

     1991. Este año participó en las siguientes exposiciones: X Salón Anual  de Arte Lagovén Oriente. Escuelas de Artes Plásticas “Eloy Palacios”. Maturín, Estado Monagas (Premio Eloy Palacios, Arte Ingenuo: La Obsesión y Decepción Sentimental Comprensiva, Justa no  Sentimental no Comprensiva y no  Justa). Pintores Regionales. Colegio de Médicos del Estado Anzoátegui, Comisión de Cultura. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela. XII Salón de Arte Fondene. Pampatar, estado Nueva Esparta-Venezuela. III Bienal de Arte Popular “Bárbaro Rivas”. Museo de Arte Popular de Petare. Petare, Estado Miranda (Mención Honorífica Pintura por sus obras: Sistema Peligroso con o sin Problemas, y Sistema Sensualista y Pederasta). XXVII Salón de Arte “La Nueva Galería”. Segunda Colectiva de Artistas del Estado Anzoátegui. Banco Mercantil Oficina Barcelona. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1992. 50 Salón de Artes Visuales “Arturo Michelena”. Ateneo de Valencia. Valencia estado Carabobo-Venezuela. II Salón de Artes Plásticas. Museo Anzoátegui. Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. La Magia Privada de Luís Méndez. Muestra individual. Galería de Arte de la Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1993. 51 Salón de Artes Visuales “Arturo Michelena”. Ateneo de Valencia. Valencia, estado Carabobo-Venezuela. I Semana Municipal del Artista Plástico. 34 Pintores, 41 Obras. Alcaldía del Municipio Bolívar, Dirección de Cultura y Turismo, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. Segundo Salón Cervecería de Oriente. Arte Ingenuo, Pintura y Talla Populares. Empresas Polar/Galería de Arte Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui (Premio Categoría Bidimensional, Pintura por la obra: Libertad de Peligrosos y más que todo Pecadores Libertinos). II Bienal Nacional de Artes Plásticas Puerto La Cruz. Homenaje a Pedro Briceño. Galería Municipal de Arte Moderno. Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui (Premio Bárbaro Rivas patrocinado por la Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui por su obra: Sistema de Organización Legitimas e Ilegítimas, pero la que Salva o que se Salva no es Delincuente y ni Pecador y ni Traidor o ni Legítimo o ni Deicida con o sin Avión). Ministerio de Educación, Dirección de Tecnología Educativa. La Cultura Popular. Pintores Populares de Barcelona: Régulo Martínez, Armando Andrade, Luís Méndez, [Programa de T.V.]. Caracas, Venezolana de Televisión.

     1994. IV Bienal de Arte Popular “Bárbaro Rivas”. Museo de Arte Popular de Petare Bárbaro Rivas, Petare, Estado Miranda-Venezuela (Premio Bárbaro Rivas, Categoría Bidimensional, Pintura por su obra: El Precursor y su Caballo Pinto y su Propiedad y su Legalidad y su Virtud y Honor y su Libertad y su Justicia). Exposición de Pintores Barceloneses, 27 de Abril Día de la Municipalidad. Alcaldía del Municipio Bolívar, Barcelona, estado Anzoátegui-Venezuela. II Semana Municipal del Artista Plástico en homenaje al pintor barcelonés Pedro Centeno Vallenilla. Alcaldía del Municipio Bolívar. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela.

     1995. Formas, Colores, Visiones. Homenaje al artista plástico. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”/Dirección de Cultura de la Gobernación del estado Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela. Confluencias .Exposición en homenaje a Mario Abreu y Bárbaro Rivas. Museo de Arte Popular de Petare/ Galería de Arte Contemporáneo “Tito Salas”, Caracas-Venezuela.

      1996. 54 Salón Nacional de Artes Visuales “Arturo Michelena”, Ateneo de Valencia, Valencia, Estado Carabobo (Premio “Edmundo Monsanto” para la Categoría Bidimensional Pintura por la obra: “Descubrimiento de la Libertad de las Personas o de toda especie) Salón Nacional de Artesanía y Arte Popular, Dirección  Nacional de Artesanía, CONAC, Museo “Jacobo Borges”, Caracas-Venezuela (Mención Honorífica por la obra: Los Mandamientos que se dividieron pero que no se dividieron también).

     1997. I Colectiva de Artistas de Oriente. Banco Mercantil, Agencia Barcelona. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela. IV Bienal de Artes Plásticas de Mérida. Homenaje a Carlos Contramaestre. Fundación  Museo  de Arte Moderno “Juan Astorga Anta”. Mérida, Estado Mérida-Venezuela. Los 12 del Michelena. Sala Cultural PDVSA. Puerto La Cruz, estado Anzoátegui-Venezuela. Los 12 del Michelena. Centro de Arte de Maracaibo “Lía Bermúdez”. Maracaibo, estado Zulia-Venezuela. Los 12 del Michelena. Fundación Banco Industrial de Venezuela. Caracas-Venezuela. Los Doce del Michelena. Casa de Las Américas, La Habana, Cuba. Muestra individual. Salón Regional de Jóvenes Artistas, homenaje a Luís Méndez. Ateneo de Barcelona “Miguel Otero Silva”. Barcelona, Estado Anzoátegui-Venezuela. 55 Salón  de Artes Visuales “Arturo Michelena”. Ateneo de Valencia. Valencia, Estado Carabobo-Venezuela. Carlos Lara Buriel (Escritor) y Manuel Alcalá (Ilustrador)  publicaron  en el diario Metropolitano el 19 de marzo el Trabajo: “Gerardo Aguilera, Armando Andrade y Luís Méndez: Genios de la Ingenuidad”.

     1998. 56     Salón de Artes Visuales Arturo Michelena, Ateneo de Valencia, Estado Carabobo. Los Doce del Michelena, Museo Gran Mariscal de Ayacucho, Cumaná, Estado Sucre. Alma y Candor  de la Costa, Paisajes, Costumbres , Tradiciones Costeras en la Pintura Popular Venezolana. Exposición Conmemorativa del 109 Aniversario del Nacimiento de Armando Reverón, Fundación Museo Armando Reverón, La Guaira, Estado Vargas.

     1999. 57 Salón de Artes Visuales Arturo Michelena, Ateneo de Valencia, Valencia, Estado Carabobo. I Salón Bigott de Arte Popular, Centro de Arte Lía Bermúdez, Maracaibo, Estado Zulia (Mención Honorífica por su obra: Descubrimiento de los que tienen o merecen justificación o derecho). Sagrado y Profano, Galería de Arte de la Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui. Colectiva de Pintores Populares. Semana Cultural Homenaje al General de División  José Antonio Anzoátegui, Dirección de Cultura de la Gobernación del Estado Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui. Visiones de un Milenio. Galería de Arte de la Asamblea Legislativa del Estado Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui. Nacidos en Barcelona, Homenaje a los 329 años  de la Fundación  de Barcelona, Ateneo de Barcelona Miguel Otero Silva, Barcelona, Estado Anzoátegui. I Salón Bigott de Arte Popular, Museo Jacobo Borges, Caracas. I Salón Bigott de Arte Popular, Museo de Barquisimeto, Barquisimeto, Estado Lara.

     2000. 58 Salón de Artes Visuales Arturo Michelena, Ateneo de Valencia, Valencia, Estado Carabobo. 20 Salón de Pintura Ateneo de Carúpano, 30 Aniversario de la Fundación  del Ateneo de Carúpano, Carúpano, Estado Sucre (Mención Especial por su obra:  El Descubrimiento de los Invasores o Traidores y de los Invadidos o Traicionados). VII Bienal de Arte Popular Nacional Bárbaro Rivas, Museo de Arte Popular de Petare, Petare, Estado Miranda. Subasta de Maestros  y Artistas Consagrados Venezolanos a beneficio del Hospital de Niños de Oriente, Gran Hotel Esperia, Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui. Colectiva de Pintores Populares, Semana Aniversario 229 Años del Natalicio de Don Simón Rodríguez, Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez/Ateneo de Barcelona Miguel Otero Silva, Barcelona, Estado Anzoátegui. Los Premios de la Galería Municipal de Arte Moderno de Puerto La Cruz, Galería Municipal de Arte Moderno,  Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui. Colectiva de Pintores Venezolanos, Sala Luís José Bonilla, Barcelona, Estado Anzoátegui. Cuando el Mar  tiene Caminos, Homenaje al General de Divisiones José Antonio Anzoátegui, Museo Anzoátegui, Barcelona, Estado Anzoátegui.

     2001. Luís Méndez Herido de  Sombras, Sala Cultural PDVSA, Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui. II Salón Bigott de Arte Popular, Galería de Arte Nacional, Caracas (Mención Honorífica por su obra: Sistema de Paz y Tranquilidad). II Salón Bigott de Arte Popular, Museo de Arte Contemporáneo de Maracay Mario Abreu, Maracay, Estado Aragua. II Salón Bigott de Arte Popular, Centro de Arte de Maracaibo Lía Bermúdez, Maracaibo, Estado Zulia. Luís Méndez Herido de Sombras, Museo de Arte Popular de Petare, Estado Miranda. Desde las Alturas, Bolsa de Productos e Insumos Agropecuarios de Venezuela (Bolpriaven), Caracas. Del Arte Ingenuo al Pop, Sharon Galería Centro de Arte, Lechería, Estado Anzoátegui.

     2002. I Salón de Arte Cerro Negro por el Arte Emergente, Operadora Cerro Negro/Ateneo de Barcelona Miguel Otero Silva, Barcelona, Estado Anzoátegui. Sinfonía Cromática en 4 Movimientos, Galería Edeberto Barbosa, Fundación  Cultural Banfoandes, San Cristóbal, Estado Táchira. Semana de Venezuela, Consulado General de la República Bolivariana de Venezuela, Intercambio Cultural Venezuela-Puerto Rico, Museo de Las Américas, Puerto Rico. Misticismo Arte y Vida, Rosa Vegas, Armando Andrade, Régulo Martínez, Pedro Caigua, Luís Méndez, Cervecería Polar de Oriente, C. A., Barcelona, Estado Anzoátegui.

     2003. Arte Venezolano del Siglo XX, La Megaexpósición 1900-2000, Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber, Caracas. . Arte Venezolano del Siglo XX, La Megaexpósición 1900-2000, Arte Popular de Anzoátegui, Casa de la Cultura Francisco Lazo Martí, Calabozo, Estado Guárico. Alquimia y Procesos, Galería de Arte El Punto, Fundación Cultural Banfoandes, San Cristóbal, Estado Táchira. II Exposición  de Arte y Metales: La Industria Metalúrgica en la Pintura Ingenua, Asociación de Industriales Metalúrgicos y de Minería de Venezuela/Museo de Arte Popular de Petare Bárbaro Rivas, Petare, Estado Miranda.

2004. Primer Salón  de Arte Popular Galpón, Homenaje a Luís Méndez, Porlamar, Estado Nueva Esparta. Segundo Salón Cerro Negro por el Arte Emergente, Operadora Cerro Negro/Ateneo de Barcelona Miguel Otero Silva, Barcelona, Estado Anzoátegui (Primer Premio Pintura por su obra:  Non Plus Ultra o Per Non Plus Ultra). VI Muestra de Arte Bolívar uno y mil Rostro en el Arte Popular Venezolano, Semana Aniversario del 223 años del Natalicio  de Don Simón Rodríguez, Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez, Sala  Régulo Martínez de la Biblioteca Central Julián Temístocles Maza, Barcelona, Estado Anzoátegui. Alquimia y Procesos: Luís Méndez, Helis Aguilera, Carlos Cruz Acero, Juan Silva, Guillermo Isava, Galería Popular Neoespartana (Galpón), Porlamar, Estado Nueva Esparta. Salón Automotriz  Siglo XXI, La Industria Metalúrgica en la Pintura Ingenua, Museo del Transporte, Caracas.

    2005. Perspectivas Múltiples, Sharon Galería Centro de Arte, Lechería, Estado Anzoátegui. Certamen Mayor de las Artes  y las Letras, Capítulo Artes Visuales, Ateneo de Barcelona Miguel Otero Silva, Barcelona, Estado Anzoátegui. Luís Méndez Conjugando Cielos, Ateneo de Barcelona Miguel Otero Silva, Barcelona, Estado Anzoátegui. VI Bienal de Artes Plásticas  de Puerto La Cruz, homenaje a Gustavo Pereira, Fundación Galería Municipal de Arte Moderno de Puerto  La Cruz, Puerto La Cruz, Estado Anzoátegui. Certamen Mayor de las Artes  y las Letras, Capítulo Artes Visuales, Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber, Caracas (Premio Arte Popular por su obra: Iglesia Alerta). Segunda Exposición  Homenaje a la Virgen del Valle, Galería Óleo y Temple, Lechería, Estado Anzoátegui. VIII Bienal de Arte Popular Bárbaro Rivas, I Edición Internacional, Museo de Arte Popular de Petare Bárbaro Rivas, Petare, Estado Miranda.

     2006. Silencio de Cielos, Eduard Díaz y Luís Méndez, Centro de Arte Moderno Sotage, Lechería, Estado Anzoátegui. Primera Exposición  Tradición  para Exportar, Congreso Venezolano de Exportadores Creando Conciencia Exportadora, Una Iniciativa  de la Asociación Venezolana de Exportadores (AVE) en Apoyo a la Difusión  del Arte Venezolano, Museo de Arte Popular de Petare Bárbaro Rivas/Hotel Intercontinental, Caracas-Venezuela.*

*Manuel Bas. Profesor Agregado, Universidad Nacional Experimental “Simón Rodríguez” (UNESR). Pregrado. Licdo. En Educación Integral, Mención Ciencias Sociales , Cum Laude (UNESR). Postgrado. Esp. en Gerencia Educacional, Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL). Curso de Postgrado de Perfeccionamiento Profesional: Problemas de la Educación en Venezuela y Ética de la Profesión Docente (UNESR). M. Sc. En Tecnología y Diseño Educativo (UNESR). Curso de Postgrado de Ampliación Culturalidad Africana Latinoamericana y Caribeña, Instituto Pedagógico de Caracas (IPC). Doctorado en Cultura y Arte para América Latina y el Caribe, Instituto Pedagógico de Caracas (IPC) Tesista.
Barcelona, mayo de 2006. Caracas, septiembre de 2017.

MUESTRA VISUAL

La Penumbra de la confianza y de la libertad o de Seguridad y de no confianza.... (1992) Óleo / tela


Reverso de la obra.

Clarividencia (1976). Óleo / tela

Sistema Paranoico Injusto y Traidor (1984).  Óleo / tela

El hombre que encontró el amor y el cariño y el aprecio o todo ternura en una mujer de sus mismos pensamientos (1999). Óleo / tela

Mundología (1976). Óleo / tela

Casa Fuerte de Barcelona (s. f.). Óleo / tela


Sentía que me halaron y en ese jalón sentí credibilidad positiva (2008). Óleo/ tela

Reverso de la obra.

Dalila (2002) Óleo/ tela

Sistema de organizaciones legítimas y ilegitimas pero la que salva o que se salva. no es delincuente y ni pecador y ni traidor o ni ilegitimo o ni deicida con o sin avión. (1993). Óleo/ tela

El descubrimiento de los invasores o traidores. Y de los invadidos o traicionados (2000) Óleo/ tela



LUÍZ MENDES ANGUSTIA Y POSIBILIDAD SUBLIME
TEXTO: Manuel Bas
FOTOGRAFÍA: Manuel Bas, Mario Abarca Serrano, Tony González
EDICIÓN DIGITAL: Eduardo Palmera Gómez
COLECCIONES PARTICIPANTES: Arq. Alfonso Sandoval, Darío Falanelli, Mario Abarca Serrano, Manuel Alcalá, Tony González, Manuel Bas

Caracas a los 19 días del mes nueve de dos mil diecisiete